La contratación electrónica es un área de práctica que se ocupa de los aspectos legales y técnicos asociados con la celebración, firma y gestión de contratos a través de medios digitales. Esta práctica asegura que los contratos electrónicos sean válidos y ejecutables bajo la ley, implementando mecanismos de firma electrónica que varían desde firmas simples hasta firmas electrónicas cualificadas, dependiendo del nivel de seguridad requerido.
También abarca el cumplimiento de regulaciones locales e internacionales, el asesoramiento sobre plataformas tecnológicas adecuadas para la gestión de contratos y la resolución de conflictos relacionados con la autenticidad y el cumplimiento de los contratos digitales.